Manifiesto por una Europa sostenible para la ciudadanía

La Unión Europea es uno de los proyectos de paz más admirables de la historia contemporánea. Se estableció una comunidad que declara como sus valores básicos la dignidad humana, el respeto de los derechos humanos, la libertad, la democracia, la igualdad y el estado de derecho.

Además de mantener una paz duradera entre sus miembros, la Unión Europea también trajo consigo ríos más limpios, protección contra la contaminación química, permisos parentales, educación de calidad y la libre circulación dentro del espacio Schengen.

A pesar la extraordinaria misión de laUnión Europea y de su gran legado, por desgracia, la respuesta de quienes toman decisiones ante la crisis financiera, al cambio climático y la degradación ambiental, al incremento de la desigualdad y la socavación de los derechos de las mujeres, a escándalos como el de nuestro sistema alimentario o el de las emisiones de los vehículos diésel y al aumento de los flujos migratorios mediante el cierre de nuestras fronteras a las personas necesitadas, ha ido encontra de los valores básicos de la Unión Europea y ha supuesto un retroceso en algunos de los logros históricos que habíamos conquistado.

La población tiene la impresión de quelos intereses económicos y financieros de los ricos se anteponen al bien común. La ciudadanía se enfrenta a las consecuencias de la austeridad —el aumento de la pobreza y las desigualdades, el empeoramiento del acceso a la asistencia sanitaria y el desempleo (juvenil)— mientras a las grandes empresas se les permite no pagar los impuestos que les corresponden. Los problemas urgentes no se resuelven; por ejemplo, la crisis climática y la contaminación atmosférica, que matan a cientos de miles de personas. En resumen, se está dejando atrás a la ciudadanía de Europa y no todos disfrutan de los beneficios de la Unión.

Además, en la Unión Europea hemos sido incapaces hasta ahora de idear una solución conjunta y humana a los desplazamientos de personas migrantes y refugiadas. No se garantiza el respeto de sus derechos humanos. También vemos que el ámbito de acción de la sociedad civil y los sindicatos para defender tanto los derechos y las libertades fundamentales como la protección básica del medio ambiente está disminuyendo en muchos países en Europa.

En estas circunstancias, muchas personas se sienten frustradas y han perdido la confianza en la capacidad de las instituciones de la Unión Europea para dar respuesta a sus necesidades. El auge de las fuerzas políticas nacionalistas y xenófobas en todo el continente es un indicador alarmante de este descontento y una grave amenaza para la democracia y nuestros valores básicos.

OTRA EUROPA ES POSIBLE

Como ciudadanía, somos conscientes de los problemas que plantea la situación actual en Europa y, cuando se habla sobre su futuro, no deberíamos limitarnos a cuestionarnos si queremos más o menos Europa, sino centrar la atención en nuestras necesidades de cara al futuro y en nuestros derechos. La pregunta clave es: «¿Qué clase de Europa queremos?».

Por eso, más de 200 organizaciones de todo el continente están haciendo un frente común para unir a la población e intercambiar ideas sobre «la Europa que queremos», así como para lograr queesta cuestión forme parte del programa de las próximas elecciones al Parlamento Europeo. Creemos plenamente en un proyecto europeo que se base en el desarrollo sostenible y en los valores éticos básicos de Europa: la democracia y la transparencia, la justicia social y ambiental, los derechos humanos, el estado de derecho, la igualdad y la solidaridad. Estos principios deben fundamentar todas las políticas y para ello es necesario que se produzcan cambios profundos a partir de hoy mismo. Queremos políticas, reglas y normas que cumplan los propósitos para los que se crearon: salvaguardar la salud y el bienestar, garantizar la seguridad y la libertad de la ciudadanía, y proteger el clima y el medio ambiente. Queremos políticas que estén al servicio de las generaciones presentes y futuras tanto dentro como fuera de Europa y que las ayuden.

HOJA DE RUTA PARA CONSEGUIR LA EUROPA QUE QUEREMOS

Para recuperar la confianza del público, el Parlamento Europeo, la Comisión Europea y los Gobiernos de los Estados miembros deben dar prioridad a las cuestiones esenciales que exponemos a continuación en la agenda de los debates que se celebrarán próximamente en relación con las elecciones al Parlamento Europeo, la nueva Comisión y el futuro de Europa:

  1. PONER EUROPA EN LAS MANOS DE LA CIUDADANÍA. Necesitamos una participación de la sociedad civil y una ciudadanía activa, renovadas y eficaces. Es imprescindible dar prioridad a ambas para mejorar la democracia (también en el trabajo), la transparencia, el acceso de toda la población a los derechos fundamentales y la confianza de la ciudadanía de la Unión Europea en la construcción de unaEuropa justa y sostenible. Es importante que la infancia y la juventud tomen parte activa como ciudadanía y que les alentemos a realizar aportaciones valiosas a los procesos políticos europeos. Se deben tomar medidas para garantizar más transparencia y responsabilidad pública en la toma de decisiones de las instituciones de la Unión Europea y de los Gobiernos de cada país. Los intereses de la ciudadanía y de la sociedad civil tienen que anteponerse a los intereses financieros y comerciales particulares. La educación cívica y el fomento del pensamiento crítico deberían capacitar a las personas para participar mejor en los debates públicos.
  • IGUALDAD Y DERECHOS HUMANOS. Las políticas públicas y las disposiciones legislativas deben garantizar que, de acuerdo con las leyes europeas e internacionales en materia de derechos humanos, todos los ciudadanos y residentes de la Unión Europea se beneficien del mismo nivel de protección y puedan ejercer sus derechos y libertades fundamentales para vivir de acuerdo con sus propias convicciones sin sufrir discriminación y al amparo de los principios de libre determinación y dignidad humana. La Unión Europea debe mejorar sus políticas y medidas para garantizar la igualdad de género. Asimismo, tiene la obligación de velar por la igualdad de oportunidades de todos aquellos que sufren múltiples formas de discriminación en nuestra sociedad.
  • UNA EUROPA SOCIAL FUERTE. El modelo social europeo debe proteger a todas las personas por completo y de manera justa sin dejar de mitigar la pobreza y brindarles oportunidades para que todos puedan prosperar. Recibir ingresosdecentes es fundamental para asegurar una buena calidad de vida y reducir labrecha entre los que más tienen y los que menos. Todas las personas—independientemente del país en el que vivan y de la generación a la quepertenezcan— tienen derecho a disfrutar de condiciones dignas en el trabajo,igualdad, más bienestar y menos desigualdades en el terreno de la salud. Losprincipios básicos que fundamenten los programas políticos tanto en el ámbitonacional como en el europeo deben ser la inclusión y protección social, lascondiciones de trabajo dignas, la igualdad de género, la salud y asistenciasanitaria pública, el acceso a una vivienda asequible y de calidad, la justiciaambiental, la educación de calidad y la igualdad de acceso a la cultura.
  • MEDIDAS DE GRAN ENVERGADURA RELACIONADAS CON EL CLIMA. El Acuerdo de París debe aplicarse plenamente y quedar plasmado en la correspondencia de los objetivos de reducción de emisiones de la Unión Europea para 2030 y 2050 con el compromiso de limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC, así como en la implementación de políticas ambiciosas en materia de acción climática como, entre otras, la eliminación progresiva rápida de todos los combustibles fósiles y el paso de la eficiencia energética a la reducción del consumo de energía entérminos absolutos. La Unión Europea debería acelerar la transición sostenible y justa a un suministro de energía 100% renovable que sea limpio y asequible, que favorezca la implicación comunitaria y que no nos aboque a la pobreza energética.
  • GESTIÓN SÓLIDA DE LOS RECURSOS NATURALES. Deben establecerse y aplicarse normas comunes que eviten la contaminación del aire y del agua, y que garanticen la producción de alimentos seguros y sanos y la protección de nuestros océanos. Es imprescindible poner en marcha iniciativas ambiciosas para detener la deforestación y la pérdida de biodiversidad tanto en Europa como en el resto del mundo, así como la explotación insostenible de los recursos naturales (también en el Sur Global). Se deben tomar medidas (estrategias de suficiencia en particular) para adaptar el nivel de consumo de nuestro continente a la capacidad productiva del planeta.
  • SISTEMAS ALIMENTARIOS SOSTENIBLES Y SANOS. Es indispensable reformar la política agrícola común para producir alimentos más sanos y garantizar un precio justo a los pequeños agricultores y las explotaciones agrícolas orgánicas de Europa. Esto debería traducirse en una mayor protección del medio ambiente y de la naturaleza, más soberanía alimentaria, mercados de productos agrícolas regionales, sistemas alimentarios más sanos, menos desperdicio de alimentos y el cese del dumping en el Sur Global. La Unión Europea debe centrar sus esfuerzos en la transición a la agricultura orgánica a pequeña escala y en la reforestación como iniciativas clave para luchar contra el cambio climático.
  • EQUIDAD TRIBUTARIA. Se deben implementar medidas tributarias coordinadas y eficaces para quetodas las empresas abonen los impuestos que les correspondan y contribuyan a los presupuestos públicos europeos y de cada país, de forma que se garantice el acceso al bienestar y a los derechos socioeconómicos. La Unión Europea tiene la obligación de comprometerse a luchar de forma efectiva contra la evasión de impuestos en todo el mundo y a clausurar los paraísos fiscales europeos.
  • UN PROGRAMA DE COMERCIO JUSTO. El comercio internacional debería considerarse como un medio para la distribución eficaz de productos y servicios respetando los objetivos sociales y ambientales. Es preciso que los acuerdos de comercio beneficien a la población, a las personas trabajadoras y a pequeños productores; no pueden concebirse como un medio que sirva únicamente a los propósitos de las multinacionales y los inversores. Con ello se lograría garantizar condiciones de trabajo dignas y mejor protección social, por ejemplo. La finalidad principal de los acuerdos de comercio y de inversión debe ser el interés público y la mejora del bienestar, no la reducción de cargas y costes para las empresas. Se deben suprimir los derechos vip de los que gozan actualmente los inversores y los tribunales de arbitraje.
  • EL PAPEL DE LA UNIÓN EUROPEA EN EL MUNDO. La Unión Europea tiene un papel esencial que desempeñaren la consecución de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Es imprescindible que todas sus políticas internas y externas sean coherentes y se correspondan con los ODS. La ayuda al desarrollo en el exterior de la Unión Europea debe priorizar a quienes más lo necesitan, como los países menos adelantados, y apoyar a las personas más marginados. Es indispensable que la Unión reestructure sus inversiones para lograr la sostenibilidad, erradicar lapobreza y conseguir que el acceso universal a los derechos fundamentales seauna realidad en todo el mundo. También debe incitar activamente a las empresas europeas que operen en el extranjero a que adopten una serie de normas europea se internacionales jurídicamente vinculantes en materia de derechos humanos, mediante el impulso de la creación de un Tratado de la Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos, por ejemplo.
  • UNA RESPUESTA A LA MIGRACIÓN CENTRADA EN LAS PERSONAS. Europa debe desempeñar un papel centrala la hora de proporcionar una respuesta humana a la migración a escala mundial que beneficie a todas las personas implicadas y los proteja. Debemos dar la bienvenida a personas solicitantes de asilo y tratarlos con el mismo talante que el que se plasma en las convenciones sobre personas refugiadas de las Naciones Unidas.
  • INVESTIGACIONES RESPONSABLES Y BASADAS EN LAS NECESIDADES DE LA SOCIEDAD. Los rendimientos de las inversiones dela Unión Europea deben destinarse al bien común y a abordar los retos a los quese enfrenta la sociedad. Los recursos actuales deben destinarse a las investigaciones cuya repercusión prevista en el futuro de nuestras sociedades y del planeta sea mayor, de forma que los resultados de los estudios priorizados hagan de Europa y del resto del mundo un lugar ecológicamente sostenible, pacífico y sano en el que vivir. No podemos seguir favoreciendo los presupuestos militares y las prioridades empresariales. Las investigaciones dela Unión Europea deben ser democráticas, beneficiar a la sociedad, estar localizadas y respetar los límites del planeta, lo cual implica un cambio de rumbo con respecto a los modelos económicos basados en un crecimiento muy marcado que generan una gran rentabilidad para unos pocos y que consumen una cantidad ingente de recursos.
  1. UN PRESUPUESTO DE LA UNIÓNEUROPEA CENTRADO EN LAS PERSONAS. El presupuesto de la Unión Europea debe emplear supotencial para fomentar la sostenibilidad, la justicia económica y el bienestar mediante inversiones en infraestructuras sociales, educación, cultura y medidasrelacionadas con el clima. Esto conlleva eliminar progresivamente los subsidios e inversiones insostenibles y potenciar los mecanismos de rendición de cuentas. Dicho de otra forma, debe ser un presupuesto por y para las personas y el planeta.

Consulta las organizaciones firmantes de este manifiesto en este enlace.

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